Dos helicópteros de la Armada dispararon por error a cinco vehículos de la policía estatal de Jalisco ayer, revelando graves deficiencias en la coordinación entre las fuerzas de seguridad mexicanas.
El incidente, en el que no hubo víctimas, ocurrió a la 1:26 a. M. En el cruce de La Ruana ubicado en la frontera entre Los estados de Jalisco y Michoacán en la violenta región de Tierra Caliente.
La policía viajaba a Jilotlán de los Dolores, Jalisco, para llevar a cabo patrullas y ayudar en la investigación del asesinato del alcalde Juan Carlos Andrade Magaña, quien fue asesinado el domingo. Gobernador de Jalisco Aristóteles Sandoval atribuyó el incidente a la confusión por parte de la armada y a la falta de coordinación entre las fuerzas de seguridad, exacerbada por las condiciones nocturnas.
“Afortunadamente, no hubo heridos, pero debemos afinar la coordinación. Es un área muy complicada donde hay una presencia naval y por el tiempo que nuestro personal estuvo viajando. . . este incidente ocurrió “, dijo.
El gobernador también dijo que se reuniría con el secretario del Interior Alfonso Navarrete Prida para fortalecer la coordinación entre las fuerzas estatales y federales a fin de evitar la ocurrencia de un incidente similar en el futuro.
Es la segunda vez en tantos meses que los helicópteros de la armada dispararon contra objetivos involuntarios. A principios de mes, el Secretariado de la Marina (Semar) aceptó la responsabilidad por la muerte de tres civiles en Nuevo Laredo, Tamaulipas, en marzo, luego de que la Procuraduría Federal (PGR) las víctimas fueron atacadas desde un helicóptero Semar.
En ese incidente, una familia que viajaba por la carretera Luis Donaldo Colosio en las primeras horas del 25 de marzo entró en la línea de fuego durante un enfrentamiento entre infantes de marina y una banda criminal. Una madre de 28 años y dos de sus hijas, de cuatro años y seis fueron asesinados.
La región donde ocurrió el incidente de ayer es notoria por crímenes violentos y el mes pasado más de 1,200 soldados fueron desplegados allí después de que la banda criminal de Los Viagras desatara una ola de violencia.
Con respecto a la investigación del asesinato de Andrade, Sandoval dijo que las investigaciones iniciales habían detectado algunas omisiones por parte de la policía municipal.
“Es crítico que no tenga ningún tipo de seguridad. . . “, Dijo, y agregó que Andrade había estado involucrado en un incidente hace algunos años y uno de sus opositores políticos se retiró de las elecciones municipales anteriores porque había sido amenazado.
La forma en que el alcalde fue asesinado fue similar a cómo el congresista Jalisco Saúl Galindo fue asesinado en diciembre, explicó Sandoval. Según la semana pasada, 78 políticos habían sido asesinados desde que comenzó el proceso electoral en septiembre pasado.