El Papa Francisco aceptó las renuncias de otros dos obispos en Chile, sumando un total de siete como consecuencias de los extensos escándalos de abuso sexual en el país.
El Vaticano anunció el 21 de septiembre la renuncia del obispo Carlos Pellegrin, de 60 años. Barrera de San Bartolomé de Chillan y Obispo Cristian Contreras Molina de San Felipe, de 71 años.
La edad normal de jubilación para un obispo es de 75 años.
Mons. Pellegrin Barrera, de 60 años, ex rector del Colegio del Verbo Divino, fue investigado en 2011 después de que un correo electrónico anónimo que se cree fue enviado por un ex estudiante acusado de abuso sexual. El correo electrónico describía las fiestas de sexo con alcohol con estudiantes “no mayores de 17 años”. También habló de dos estudiantes que se suicidaron después de un posible abuso.
El correo electrónico también describía la conducta inapropiada de al menos otros tres sacerdotes con estudiantes y trabajadores. En cuanto a Mons. Contreras Molina, el otro obispo retirado el viernes, es uno de los siete obispos que aparecen en el último censo del fiscal nacional por acción criminal vinculada a sospecha de abuso sexual en la Iglesia Católica.
Según un comunicado de la Oficina de Prensa de la Santa Sede, Pellegrín y Contreras fueron reemplazados por los administradores apostólicos de los lugares vacantes, Sergio Hernán Pérez de Arce y Jaime Ortiz de Lazcano, en las diócesis de San Bertolome de Chillan y San Felipe, respectivamente.
Incluyendo a Pellegrin y Contreras, siete prelados chilenos fueron destituidos por el Papa Francisco desde el 17 de mayo, cuando los 34 obispos chilenos, 31 en servicio activo y tres eméritos, renunciaron en masa después de una reunión de tres días con el Santo Padre, quien los convocó a Roma para analizar lo sucedido.
Papa Francisco expulsa al sacerdote chileno por abuso sexual infantil. Las renuncias colectivas tenían como objetivo liberar las manos del Papa Francisco para tomar las acciones que consideraba pertinentes, como lo hizo el 11 de junio cuando despidió a Juan Barros, Cristian Caro y Gonzalo Duarte, y 20 días después, con los despidos de Horacio del Carmen Valenzuela y Alejandro Goic.
La diócesis de Chillan fue una de las cuatro incursiones de las autoridades chilenas la semana pasada en investigaciones del abuso sexual de menores y la supuesta cobertura de la jerarquía.
Esta semana, el Papa Francisco ordenó que el reverendo Cristian Precht Bañados, de 77 años, fuera removido del sacerdocio por acusaciones de abuso sexual a menores en Chile.