Cheng Kaijia, el físico nuclear detrás del programa de armas nucleares de China, murió en Beijing a la edad de 100 años, se informó el sábado.

Se dice que ha equipado a China con las armas más mortíferas y devastadoras de la tierra, según un informe de prensa.

Cheng participó activamente en la investigación, el desarrollo y las pruebas de las primeras bombas nucleares chinas a niveles “teóricos, tecnológicos y metodológicos”, según la Fundación HLHL, una ONG con sede en Hong Kong, que otorga premios a científicos chinos.

Se le atribuye la solución de uno de los problemas clave detrás del desarrollo de cualquier bomba nuclear mediante la creación de un modelo teórico del mecanismo de la explosión interna de la bomba atómica.

En 1960, también calculó la temperatura y la presión en un epicentro de una explosión nuclear sin la ayuda de ningún sistema computarizado, que no existía en China en esos días y cuatro años más tarde, participó en la primera prueba de bomba nuclear de China y que De la bomba de hidrógeno en 1967.

También estudió los efectos de las explosiones nucleares y promovió activamente un programa de investigación destinado a mitigar algunos de estos efectos, como microondas de alta potencia o radiación nuclear inicial.

Beijing le otorgó el premio de ciencia más importante de China en 2014 y su más alto honor militar en 2017.